A vacío metálico donde ya
nada cabe,
donde sobra todo
lo accesorio.
Y lo vital
carece de espacio.
Suena a tormenta eléctrica,
a hierba cicatrizada.
¡Ras!
Cae la barba del padre muerto
mientras el hijo contempla absorto
la grandeza del acto,
la majestuosidad del barbero.
