Hoy hemos llorado afuera

todos sin movernos de aquí ,

sin ejercitar más músculo que

un corazón que sólo funciona

a medio gas. 

Hoy llovió,

afuera

y un poco dentro también.

Hoy hemos vuelto a llorar ,

ampliando nuestro espacio ,

empeñándonos en acabar

con el bicho que amenaza, 

el que sigue matándonos

de pena.

De ira

De enfermedad mortal.

Hoy ha llovido afuera,

pero poco, muy poco para mi gusto.

Porque quise cuando empezó

que arrasara con  todo

para así

poder empezar de nuevo.

Y construir. 

Edificar 

Curar.

Amar.

Poblar.

Sembrar. 

Que nos diera la oportunidad 

de arrepentirnos , 

de sentirnos , 

de reconciliarnos con la vida.

Somos una masa palpitante de personas

que, últimamente, lejos de respirar 

nos ahogamos en un mar

que hace muy poco

dejó de acercarse a la playa. 

Ilustración de Iria Gómez Rodríguez

El vuelo sin motor by Fátima Rodríguez Checa is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
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